Tal y como estaba previsto, el ayuntamiento de Pollença ha decidido cancelar de forma definitiva el acto más representativo de las fiestas de la Patrona: el simulacro de moros y cristianos.

Durante el transcurso de una junta local de seguridad celebrada hace unos días, el equipo de gobierno, la Policía Local y la Guardia Civil descartaron la celebración del simulacro y también de las tradicionales Canonades, dos de los actos más multitudinarios de la fiesta.

El Consistorio prepara dispositivos de prevención extraordinarios para evitar que se formen concentraciones espontáneas de gente.