El pleno del lunes empezó con bajas en Binissalem. Los dos regidores de Més, Aurora Mateu y César Moreno, abandonaron la sala al recriminar al alcalde, Víctor Martí, que el pleno estaba vacío de contenido.

La regidora ecosoberanista pidió la palabra antes de que el alcalde diera inicio a la sesión y expuso su punto de vista. Mateu se quejó de que en el orden del día no había ninguna propuesta por parte del equipo de gobierno, simplemente ruegos y preguntas, a pesar de tener "diferentes temas por tratar desde hace meses". La regidora también recordó que durante 2020 solo se han llevado a cabo dos plenos ordinarios, uno en febrero y otro en junio, y en ese último, dijo, "la mitad de los asuntos quedaron encima de la mesa". Además, añadió que la oposición llevó más temas a tratar que el propio equipo de gobierno.

Aurora Mateu también apuntó que durante el estado de alarma la información recibida por parte del equipo de gobierno había sido "nefasta" y recriminó que, en pleno estado de alarma, tuvo que ser la oposición la que convocara un pleno extraordinario para poder saber todo lo que había ido realizando el gobierno local desde el 14 de marzo, y la actitud fue la misma: "cero información a las preguntas planteadas".

Mateu criticó que el alcalde les convoque a plenos y "cuando ve el resultado de las votaciones lo deja encima de la mesa", como ocurrió el pasado 18 de junio con las facturas extrajudiciales. Sobre este tema, apuntó la regidora que el alcalde ha convocado para hoy una junta de portavoces para revisar las facturas, una tarea que, según Mateu, le corresponde a él como alcalde y a sus concejales. Desde Més per Binissalem exigen al regidor que asuma la responsabilidad que le corresponde ante este expediente y que administre bien el dinero municipal.

Con Més fuera de la sala, tanto PSOE como PP compartieron las quejas de sus compañeros de oposición. Una de las preguntas que suscitó más discrepancias fue la que formularon los socialistas en relación al convenio con el Obispado sobre el uso del casal de Cals Agustins. El edil Pep Maria Pons apuntó que hubiera sido positivo que dicho convenio hubiera sido debatido en el pleno, pero el alcalde recordó que en todas las legislaturas anteriores el convenio nunca había pasado por pleno.

Por su parte, el popular Andreu Villalonga indicó al alcalde que la asesora de comunicación del equipo de gobierno pretende cobrar una factura cuyo concepto es una nota de prensa que habían emitido los tres partidos de la oposición. El alcalde negó que ese fuera el concepto de la factura.