El ayuntamiento de Santa Margalida está ultimando los preparativos para retirar de forma definitiva los restos de un yate que desde finales de agosto del pasado año permanece varado sobre la arena de la playa de Can Picafort, cerca de la frontera territorial con el municipio de Muro. Al igual que ocurrió en otros municipios costeros de la isla, el barco fue arrastrado por uno de los episodios de gota fría que afectaron a Mallorca al final del pasado verano y que provocaron numerosos desperfectos en el litoral.

Fuentes del área de Medio Ambiente de la institución municipal aseguraron que, en principio, las obras de desmonte de la embarcación se llevarán a cabo en los próximos días. El Consistorio ha decidido que sea la empresa que está contratada para la limpieza de las playas del municipio la que se encargue de las tareas de desguace del velero, que será troceado. Los restos se enviarán posteriormente a la empresa Mac Insular para que los gestione como residuos convencionales, ya que se ha constatado que la embarcación no cuenta con productos contaminantes debido a que las piezas más delicadas, como el motor, ya han sido sustraídas después de casi un año de abandono sobre la arena.

Empresa catalana

Durante este año, el ayuntamiento de Santa MargalidaSanta Margalda ha realizado gestiones para tratar de localizar a los propietarios de la embarcación con el objetivo de reclamarles su retirada. La institución local pudo comprobar que el yate es propiedad de una empresa de alquiler de embarcaciones radicada en Barcelona.

La Policía Local se puso en contacto con esta empresa, que en un primer momento aseguró que se encargaría de la retirada del barco. No obstante, según aseguran las fuentes de Medio Ambiente, poco después "se perdió el contacto" de la empresa, que no ha vuelto a manifestarse.

Por este motivo, el Ayuntamiento margalidà pagará en primera instancia los gastos de la retirada del barco para después pasarle la factura a la propiedad. En principio, el presupuesto rondaría los mil euros, aunque no se descarta que suba ligeramente si la empresa encargada del desguace se ve obligada a utilizar maquinaria pesada. "Como mucho podría ascender hasta los 2.000 euros", señalan las fuentes municipales.

Actualmente, el yate es visible desde un amplio sector de las playa de Can Picafort y Can PicafortMuro. Se encuentra varado sobre la arena y ha sido víctima de actos de vandalismo consistentes en la sustracción de todos los objetos de valor que había en el interior, ya que no tiene puertas que impidan el acceso a la cabina. Incluso el motor ha desaparecido.

Los grafiteros también han aprovechado el casco de la embarcación para plasmar sus pintadas. En pocos días, el yate será retirado de su actual emplazamiento.

El ejemplo de Calvià

El ayuntamiento de Calvià culminó el pasado mes de abril los trabajos de retirada de la embarcación de 22 metros de eslora que permanecía varada en la playa de Son Matiesretirada de la embarcación de 22 metros de eslora que permanecía varada en la playa de Son Maties, en el núcleo de Palmanova, desde hacía un año. Las tareas se realizaron mediante el sistema del desguacesistema del desguace, ya que el Consistorio descartó por inviable la retirada del barco por mar o por carretera.

La institución municipal decidió abrir un procedimiento de urgencia para proceder a la retirada de la embarcación, que ya presentaba un avanzado estado de degradación, debido a la pasividad de la propiedad, que no respondió a los requerimientos del Ayuntamiento.

A diferencia del caso de Can Picafort, el coste para Calvià fue muy elevado: un total de 78.650 euros78.650 euros.