Las unidades básicas de salud (UBS) están cerradas al público desde el inicio del estado de alarma, una situación que está generando muchos problemas a las unidades territoriales que dependen de estos centros para recibir asistencia sanitaria en primera instancia. Los municipios de Deià y Fornalutx son dos ejemplos de esta situación porque están sin médico desde mediados de marzo, algo que ha generado protestas entre sus vecinos que sus respectivos alcaldes han trasmitido a las autoridades sanitarias.

El ayuntamiento de Deià ha remitido sendos escritos al Govern solicitando la restitución de los servicios médicos en la UBS del pueblo, además de la recuperación de todas las frecuencias de transporte público en la línea 210 de bus que transita entre Sóller, Deià, Valldemossa y Palma.

El alcalde, Lluís Apesteguia, ha remitido un escrito al director general del Servicio de Salud, Juli Fuster, pidiendo la reapertura de la UBS alegando los problemas que sufren los vecinos del municipio. En la carta le explica que cuando comenzó la crisis del coronaviruscrisis del coronavirus "los deianencs entendimos a la perfección" que se cerrara la unidad, ya que "eran momentos de reducir los contactos y optimizar los recursos". Ahora bien, a estas alturas, coincidiendo con la desescalada del confinamiento que se está llevando a cabo "consideramos que se debería estudiar el paulatino retorno al funcionamiento ordinario de nuestra unidad de salud". Apesteguia recuerda que muchos vecinos de la localidad necesitan atención sanitaria, ya sea para la atención de enfermedades ordinarias o para tratar pacientes crónicos, lo que los obliga a trasladarse hasta el centro de salud de Sóller, pese a que hay residentes que no disponen de vehículo.

Fornalutx se encuentra en la misma situación que Deià. Su alcalde Francesc Marroig mantuvo hace unos días una reunión con los responsables del centro de salud de Sóller para solicitar el retorno del médico de familia a la UBS del municipio. De momento, las peticiones realizadas por ambos municipios de la Serra no han obtenido una respuesta satisfactoria por parte de las autoridades sanitarias del Govern.