El ayuntamiento de Inca ha agilizado la ampliación de las terrazas de bares, cafeterías y restaurantes, muchos de los cuales reabiertos desde el pasado lunes, con el objetivo de "garantizar las medidas de seguridad sanitaria y facilitar el desarrollo de la actividad de los restauradores para ayudar en su recuperación", según apunta el regidor de Urbanismo y Actividades del consistorio inquer, Andreu Caballero. Hasta ahora se han recibido 34 solicitudes en este sentido.

Para agilizar este proceso, el Ayuntamiento "ha simplificado la tramitación" a los interesados. Posteriormente, estudia cada caso "de manera individualizada" con el objetivo de proponer "la solución más adecuada en el menor tiempo posible", añade el regidor. En este sentido, la institución explica que se han consensuado unos criterios básicos para garantizar el cumplimiento de las medidas de seguridad e higiene establecidas, de acuerdo con las instrucciones publicadas en el BOE.

También se tiene en cuenta la movilidad de los peatones y el "correcto desarrollo" de otras actividades que puedan coexistir en un mismo espacio como el mercado semanal de los jueves, así como evitar las aglomeraciones.

Según el Ayuntamiento, hasta la fecha se han recibido 34 solicitudes de ampliación de terrazas. "En la medida de lo posible se ha intentado no ocupar espacio reservado para los peatones", asegura la institución municipal.

Por otra parte, en colaboración con la Policía Local, el Consistorio trabaja para habilitar nuevos espacios para viandantes con la finalidad de "compensar los metros cuadrados ocupados por terrazas y ganar todavía más espacio para los peatones", añade Caballero.

En este sentido, de forma paralela se han cerrado al tráfico diversas calles para dar más protagonismo a los peatones, que de esta forma cuentan con un mayor espacio para pasear y practicar deporte. El Consistorio recuerda que la pasada semana se habilitaron ocho rutas para favorecer las salidas a la calle de todos los ciudadanos y evitar masificaciones. "El objetivo es evitar aglomeraciones en las principales vías de la ciudad y ampliar los espacios para los peatones para que puedan salir de forma segura", apuntó en su día el alcalde Virgilio Moreno.

Desde ayer lunes, día de la entrada en vigor de la Fase 1 de la desescalada en Mallorca, están cerrados al tráfico rodado las siguientes calles de la ciudad: Antoni Fluxà desde Ramón Llull hasta Jaume Armengol; Plaça de l'Orgue; Plaça Orient; y las calles Sirena y Jaume Armengol, además de un tramo de la calle General Luque entre las 17 y las 23 horas.