Más de cien establecimientos dedicados a la restauración de Sóller han iniciado la campaña "SOS Volem tornar! Així no!" para exigir a las administraciones públicas "garantías" en materia de seguridad para abrir sus establecimientos a partir de la próxima semana. Si no se tienen una respuesta clara, el sector de la restauración rechaza abrir al público tras la entrada en la fase 1 de desconfinamiento de la próxima semana.

Los establecimientos que se han sumado a la campaña son bares, cafeterías, restaurantes y hoteles, un sector que aglutina a unos 2.000 trabajadores en Sóller y Fornalutx. A través de un comunicado, los empresarios ponen de manifiesto que la normativa que les permitirá abrir al público a partir de la próxima semana es confusa. Aseguran que "no es que prefiramos tener cerrado, es que es inviable a todos los niveles". Por eso reivindican garantias de seguridad y sanitarias con la realización de tests masivos, protocolos sanitarios, seguridad jurídica y laboral para que se mantengan los ERTE por fuerza mayor y seguridad económica para sus negocios.

En esta materia exigen ayudas económicas y una bajada de la presión fiscal "a la que estamos sometidos los negocios". Los empresarios ponen de manifiesto que "todavía no sabemos si nos eximirán o bonificarán algunos de estos gastos". En opinión de este importante sector de la economía del valle, la incertidumbre acabará por generarles más gastos y una importante disminución de los ingresos. "Sin turismo y con mucha más oferta que demanda no podemos sobrevivir todos", aseguran, ya que "tenemos miedo con todo este escenario que se nos presenta, inviable económicamente".

El sector de la restauración teme que "si damos un paso en falso al abrir podríamos hundirnos si no tenemos ningún tipo de información, ni seguridad jurídica, económica o laboral", por lo que "ante este escenario no podemos abrir", concluyen.