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"Es importante saber parar ante una pantalla"

La óptica optometrista Aina Autonell, de Òptica sa Pobla, lanza una serie de consejos para evitar daños visuales durante el encierro

Las pantallas pueden provocar muchos problemas visuales. osp

El confinamiento ha aumentado de forma considerable el uso de los aparatos electrónicos, con el consecuente peligro de provocar daños en la vista. Según un estudio de la plataforma de educación digital 'Empantallad0s', realizado en 2019, los españoles pasan frente a una pantalla una media de once horas diarias, lo que equivale a 167 días al año. Unos datos ya de por sí preocupantes que se han incrementado de manera exponencial durante estos días de cuarentena, y especialmente entre los niños y niñas.

La óptica Aina Autonell, de Òptica sa Pobla. OSP

Aina Autonell, óptica optometrista de Óptica sa Pobla, ha lanzado una serie de consejos para paliar los daños que tantas horas de exposición a las pantallas causan en nuestra vista. Unos consejos que van dirigidos principalmente a los más pequeños, que "han pasado de llevar unas rutinas en espacios abiertos a tener que adaptar su día a día a espacios más reducidos", apunta.

La profesional explica que los peligros más inmediatos del exceso de exposición a las pantallas son el cansancio visual, ojos rojos, visión borrosa, dolor de cabeza y, progresivamente, un aumento de la miopía. "Los profesionales de la visión estiman que, con el aumento de las horas que pasamos delante de pantallas, puede incrementarse el Síndrome Visual Informático, que podemos percibir como irritación y escozor en los ojos, ya que al estar delante de la pantalla, parpadeamos menos", apunta Autonell.

Y es que los nuevos dispositivos electrónicos irradian más luz azul que los móviles y aparatos más antiguos, por lo que "nuestros ojos están más expuestos a sufrir problemas visuales".

Principales consejos

Aina Autonell ha aprovechado los días de confinamiento para seguir formándose desde su domicilio y elaborar un listado de consejos para compartir a nivel familiar y de esta forma "cuidar la salud visual durante el tiempo que permanezcamos en casa".

Así, la primera recomendación se refiere a la distancia que debemos guardar con la pantalla del dispositiv0, que es diferente en función del aparato que tengamos delante. "Para móviles se recomienda como mínimo un palmo, es decir, entre 20 y 40 centímetros; en caso de tabletas, entre 40 y 50 centímetros de distancia; para los ordenadores se aconsejan unos 55 centímetros y en el caso de la televisión, entre 60 centímetros y 3-4 metros de distancia", explica la profesional de la visión.

Otro consejo importante es el de aplicar la "regla 20-20-20", que significa descansar la mirada 20 segundos cada 20 minutos mirando lejos unos 20 pies (seis metros).

La televisión es uno de los aparatos más recurrentes para mirar en familia durante estos días de confinamiento. La óptica aconseja "no ver la tele tumbados o de lado, ya que la visión se desvirtúa y acabamos creando un problema añadido". Además, "si llevamos gafas, la recomendación de no ver la tele de lado es aún más acentuada, ya que enfocamos la visión de manera incorrecta y, además de poder clavarnos alguna parte de la montura, la podemos estropear".

Sin pantallas antes de dormir

Por otra parte, la profesional aconseja no mirar dispositivos antes de ir a dormir porque "nuestros ojos deben estar descansados y relajados; es mejor leer un libro".

Evidentemente, los consejos dirigidos a los niños también apelan a los padres y madres, a quienes Aina Autonell insta a "dar ejemplo" a sus hijos y no engancharse de forma excesiva a las pantallas durante estos días en los que muchos están pendientes de la actualidad por motivos obvios. "Es importante saber parar y dar ejemplo a los más pequeños, así ellos también entenderán que deben parar", señala.

Por último, la óptica optometrista lanza una recomendación dirigida a toda la familia y que, según precisa, "quizá es el más difícil de seguir". Y es que Autonell cree que hay que elegir un día de desconexión digital en familia. "Es una invitación a reconectarnos con nuestras familias y alejarnos, durante unas horas, de los dispositivos", explica.

Durante esta fase, "la familia puede decidir cuánto tiempo se puede dedicar a las pantallas y con qué objetivo: educación, diversión o charlas con familiares y amigos". En definitiva, hay que hacer un "uso consciente".

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