Ports de les Illes Balears mantiene su intención de implantar la regulación de los aparcamientos de la zona portuaria mediante ORA, pese a que los vecinos del Port de Sóller se oponen frontalmente a la medida hasta el punto que amenazan con bloquear los accesos a la zona de muelles si finalmente se materializa. Los vecinos especularon el miércoles con la posibilidad de que Ports diera marcha atrás en su decisión o que fuera postergada más adelante, lo que desde Ports se negó.
La regulación de las 119 plazas de aparcamientos se hará efectiva a partir del 1 de marzo, momento en que para estacionar en la zona competencial de Ports será necesario pagar el ticket de la ORA, una obligación de la que quedarán excluidos los pescadores y los usuarios náuticos que tienen un punto de amarre en base.
El resto de conductores, incluidos los residentes de la barriada de Santa Catalina, que son los más próximos y más perjudicados por la iniciativa de Ports, deberán abonar la tarifa vigente a razón de un euro la hora.
La ORA estará activa del 1 de marzo al 31 de octubre, de lunes a domingo, entre las 9 y las 14 horas y entre las 16 y las 21 horas.
Grave malestar
El grave malestar de los vecinos del Port se hizo patente el miércoles por la noche en una reunión que se celebró en el oratorio de Sant Ramon de Penyafort, donde los residentes dejaron caer la posibilidad de bloquear el acceso viario a la zona portuaria si finalmente se aplica la regulación del estacionamiento.
A la reunión acudió una treintena de vecinos, la mayoría de los cuales son residentes en Santa Catalina, miembros de la Asociación de Vecinos del Port de Sóller y representantes del ayuntamiento encabezados por el alcalde Carlos Simarro.
En esta reunión, la representante de la asociación vecinal dijo que Ports estaba dispuesto a posponer la aplicación de la ORA y a reunir-se con los residentes. Pero este anuncio fue desmentido ayer por el organismo público, que aseguró que los planes de aplicación de la regulación del aparcamiento de los muelles siguen adelante. Es más, señalaron que estos días se pintarán las líneas azules en el pavimento y se colocarán los parquímetros.
Desde Ports esgrimieron la inviabilidad técnica de aplicar unas tarjetas de residente en la zona portuaria como exigen los vecinos porque no está recogido en la norma, ya que recordaron que "unos 600 usuarios" podrán seguir estacionando gratuitamente en los muelles. Ports hacía referencia a los pescadores y los titulares de amarres en base.
También apuntaron que la creación de unas eventuales tarjetas de residente podría hacer inviable económicamente una concesión que ya ha sido otorgada mediante un contrato. Por su parte, el alcalde prevé mantener contactos con Ports y mediar con los vecinos.
