La Audiencia de Palma ha confirmado la condena a sendas multas de 480 euros a tres alemanes que vivivieron como okupas, durante bastante tiempo, en la mansión que el extenista Boris Becker poseía en Artà y que ahora es propiedad de la empresa Goattbridge.
Los okupas fueron condenados en primera instancia por un juzgado de Manacor y recurrieron la sentencia en apelación. Ahora la Audiencia ha estimado probado el delito leve de usurpación no violenta y ha confirmado las penas de multa para los acusados.
La finca ocupada estaba en manos de la administración concursal de una sociedad y había sido adjudicada a un banco. Los acusados admitieron que se habían metido a vivir allí, pero rechazaron haber cometido un delito.
Hace unos días una comisión judicial, acompañada de efectivos policiales, procedió al desalojo de los últimos okupas de la mansión, una pareja joven con un niño.procedió al desalojo de los últimos okupas de la mansión, una pareja joven con un niño.
La okupación de este inmueble fue objeto de interés informativo, tanto de los medios de comunicación españoles como los alemanes.
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