La red de abastecimiento en alta que surte de agua los municipios de Mallorca acabó 2019 con unas pérdidas del 5%, lo que supone una reducción de las fugas del 44% respecto a diciembre de 2018. Según informó ayer la conselleria de Medio Ambiente y Territorio en un comunicado, el rendimiento de la red en alta ha pasado en un año del 91% al 95% gracias a las inversiones mínimas de mantenimiento que se impusieron por primera vez a la empresa adjudicataria en el último ejercicio.
Estas inversiones han permitido reducir fugas en instalaciones como ventosas y desagües, sustituir equipos de medición de caudal deteriorados y reparar conducciones dañadas.
Medio Ambiente explica que el contrato de explotación, mantenimiento y conservación de las instalaciones de abastecimiento de agua en alta (la red básica que provee a los municipios) se suscribió por un importe de 10,3 millones de euros por cinco años, dotación de la que dos tercios se destinan a inversiones de mejora.
El contrato comprende la gestión de las instalaciones de agua potable de Sa Costera, el acuífero de s’Estremera, la arteria de Poniente y Marratxí, Son Pacs, Sa Marineta y todas las instalaciones anexas.
