La red municipal de cámaras de videovigilancia se ampliará a partir del año que viene en el municipio de Calvià. El Ayuntamiento prevé instalar por primera vez estos dispositivos en la localidad residencial de El Toro. Y aumentará el número de los ya existentes en Santa Ponça, también en zonas residenciales.

En los últimos tiempos, tanto en El Toro como en otras urbanizaciones del municipio se han producido robos que han activado la alerta vecinal.

Los presupuestos elaborados por el gobierno municipal de PSOE y Podemos-Més incluyen una partida de 100.000 euros para la primera fase de la mejora y ampliación del sistema de cámaras de videovigilancia en diversas zonas del municipio.

En la actualidad, esta red de cámaras de seguridad ya opera en los núcleos calvianers de Peguera, Santa Ponça y Santa PonçaMagaluf, que son puntos eminentemente turísticos del término.

Las nuevas cámaras se irán instalando por fases, según explican fuentes municipales. En una primera fase, se pondrán en zonas residenciales de Santa Ponça y El Toro.

Modernización de dispositivos

Igualmente, en este periodo inicial que ya cuenta con dotación presupuestaria, la administración municipal prevé la modernización de las cámaras de videovigilancia existentes, con funciones más avanzadas "para hacer el tránsito a la tecnología digital", según detallaron esas fuentes municipales. En El Toro se instalarán por primera vez este tipo de dispositivo de videovigilancia.

Denuncias de robos

Se da la circunstancia de que esta tranquila localidad residencial situada entre Son Ferrer y Santa Ponça ha sufrido varios episodios de robos en los últimos años, lo que en algunos momentos ha elevado sobremanera la inquietud vecinal.

De hecho, a finales de 2018, se celebró una reunión en la asociación de la tercera edad de este núcleo, a la que asistieron numerosos vecinos y los principales responsables de seguridad de Calvià.

Allí, los mandos policiales quisieron transmitir un mensaje de tranquilidad a los residentes. El entonces jefe de la Policía, Justino Trenas, explicó que eran delitos de "oportunismo y de escasa cuantía" y que no tenían nada que ver con la grave oleada de robos de 2016.

En aquel entonces, la preocupación entre los vecinos fue máxima ante la sucesión de episodios de sustracciones. Hasta el alcalde Alfonso Rodríguez Badal llegó a asegurar que entendía la "preocupación" de los residentes. Posteriormente, se produjo la desarticulación de una banda de ladrones que operaba en esa zona.

Este verano, Izquierda Unida de Calvià denunció el incremento de robos en zonas del municipio como Costa de la Calma, al tiempo que reclamó más seguridad en ésta y en otras zonas residenciales.

La inversión en cámaras de videovigilancia, que asciende a 100.000 euros, constituye una de las principales partidas para la Policía Local. Además, se destinarán 125.000 euros en 2020 a la renovación del vestuario y del equipamiento de los agentes.