Miquel Oliver Gomila (Manacor, 1974) es el alcalde de Manacor que no ha dudado en toser a la familia Nadal. Esta última semana ha sido el blanco de las críticas de medios nacionales tras la carta de Rafa Nadal, dolido por las palabras de su alcalde que dudaba de su "manacorinidad". Pese a su condición nacionalista ha mantenido sus altibajos con la dirección de Més. Aseguran que ahora, tras la llegada de Toni Noguera al frente del partidollegada de Toni Noguera al frente del partido, ha vuelto a coger protagonismo en la coalición.

Miquel Oliver siempre se ha mantenido firme y en la misma línea contra la recalificación de la Academia Nadal mediante una ley específica. Ha tenido que tragar un Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), que heredó del PP y El Pi, donde la familia del tenista también tenía intereses en la zona de Torre Florida. Consiguió recortarlo, pero no se libró de las críticas de los ecologistas y entidades afines a su coalición que querían que lo paralizara.

Oliver es un histórico del PSM. Entró en el partido de la mano del recordado edil nacionalista Gustau Fernández, fallecido en accidente de tráfico en 2003. Después consiguió ser concejal y en 2015 ascendió a la alcaldía, pero solo pudo estar 144 días, una cifra que lleva tatuada en su cuerpo y representa los días que van desde que asumió la vara en 2015 a cuando el PP y El Pi le presentaron la moción de censura para desalojarlo. En 2019 consiguió hasta seis ediles, pudo formar el pacto de izquierdas y resarcirse con la vara de mando de alcalde de aquella fatídica moción de censura.

Juró su cargo, junto a sus cinco concejales de Més-Esquerra, apelando al "imperativo legal de un Estado con presos políticos y exiliados y sin renunciar al derecho de autodeterminación de los pueblos". Esta semana todos los medios nacionales le han criticado su independentismo, pero Oliver lo tiene claro y no dudó en suspender durante una hora el pleno municipal de octubre para acudir a la concentración en contra de la sentencia del procés. Es presidente de la plataforma Avançam, que engloba a ediles de Balears a favor de la autodeterminación. Cuando el Rey emérito Juan Carlos I visitó la Academia Nadal hizo un sonado tuit: "Realizado el recuento de elefantes de Manacor, no falta ni uno".

En su primera etapa de alcalde recibió la visita de los enviados de la familia Nadal y le pidieron que intercediera con el entonces vicepresidente y conseller de Turismo de su partido, Biel Barceló, para poder desarrollar el proyecto de la Academia. Oliver no les hizo caso y se limitó a indicarles que la conselleria de Turismo estaba en la calle Montenegro de Palma. Barceló llegó a recibirles, pero no por la intermediación del alcade. El vicepresdente se negó a incluir la recalificación en la Ley Turística, operación que después consiguieron a través del conseller de Movilidad, el socialista Marc Pons. Se incluyó la disposición en la Ley de Vivienda para recalificar y dotar de plazas turísticas a la Academia. Una operación que Més votó en contra en el Parlament tras escuchar al alcalde de Manacor. Al final PSOE y PP fraguaron la recalificación.

La equivocación de Miquel Oliver es haber acusado de moroso a Rafa Nadal con el IBI y la tasa de basuras. Entre otras cosas por el hecho de que la zona en concreto de la Academia había sufrido una revisión catastral y el pago de tributos estaba paralizado. Por ello no pudieron pagarlo. El enfrentamiento del alcalde no es con el laureado tenista, al que siempre ha reconocido sus méritos, es más con su entorno.

Relaciones con Més

Miquel Oliver era una persona de la cúpula de Més cuando Biel Barceló y Fina Santiago estaban al frente del partido. Después se distanció un poco del partido. Durante la campaña electoral de las elecciones municipales y autonómicas prácticamente no visitaron Manacor los principales candidatos de Més, Miquel Ensenyat y Bel Busquets. No es que Oliver les vetara, pero tampoco los invitó, explican fuentes de Més.

El resultado fue que Més-Esquerra en Manacor mejoró el resultado de 2015 y ahora Més ha cogido esta fórmula para consolidar su coalición. Miquel Oliver, tras la llegada de Antoni Noguera, ha vuelto a la primera línea del partido y ha entrado en la ejecutiva. Noguera y los diputados de Més querían salir en defensa de Oliver tras el linchamiento mediático nacional. Fue el propio Oliver quien les pidió que la polémica con los Nadal se dirimiera solo en Manacor.

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