Una célula tormentosa descargó durante la madrugada de ayer 98 litros de lluvia por metro cuadrado en menos de una hora en el norte de la isla. Las peores consecuencias se registraron en Can Picafort, donde los Bombers de Mallorca y voluntarios de Protección Civil tuvieron que achicar una veintena de sótanos y bajos comerciales que estaban anegados.

Según informa la jefa del Centro de Meteorología, María José Guerrero, toda la isla sufrió precipitaciones durante la madrugada de ayer, pero la zona norte se vio afectada por una célula tormentosa muy localizada e intensa. La estación meteorológica instalada en s'Albufera de Muro registró durante la madrugada la caída de 108 litros de agua de lluvia por metro cuadrado, pero 98 de ellos se recogieron en menos de una hora, entre las cuatro y las cinco menos diez.

Esta tromba de agua se dejó sentir especialmente en Can Picafort. Desde primera hora de la mañana la central de los Bombers de Mallorca recibió numerosos avisos de inundaciones, sobre todo en locales comerciales y sótanos.

Las dotaciones de los bomberos, junto a voluntarios de Protección Civil, estuvieron trabajando durante todo el día para achicar el agua que se había acumulado en una veintena de locales.

Meteorología detectó el paso de otra célula tormentosa por la península de Artà, aunque no causó daños en zonas habitadas.