El camino del Rafal quedó cerrado al tráfico por orden del Ayuntamiento de Búger desde el lunes por la mañana. Se ha comprobado que el asfalto del camino empieza a ceder y se desplaza peligrosamente hacia uno de los lados lo que supone un grave riesgo para los vehículos que puedan transitarlo.

El camino del Rafal es la antigua carretera secundaria que unía Búger y sa Pobla antaño. En la actualidad es utilizado sobre todo por agricultores para transitar con sus vehículos de labores agrarias.

En un punto en concreto del trazado se encuentra una profunda sima (avenc, en mallorquín) que hace unos años se dejó notar. Se abrió considerablemente sin que se pudiera atisbar su profundidad. Entonces, el Ayuntamiento que presidía Bartomeu Alemany hizo un arreglo consistente en rellenarlo con rocas de las usadas para hacer escolleras en los puertos. Durante unos años la solución ha funcionado y el camino no ha registrado problemas.

No obstante, las lluvias de los últimos años han terminado por conseguir que la sima se agrande. Cada vez que llueve el agujero se hace más grande y, "para la seguridad de todos, se hacía necesario tomar esta decisión", explicó el alcalde Pere Torrens.

El camino quedó clausurado a la altura de Son Genet. El alcalde emitió un bando exhortando a los vecinos a respetar el cierre y, "si aun así, alguien quiere pasar por el camino lo hará bajo su exclusiva responsabilidad", indicó Torrens.

El ayuntamiento de Búger ya tiene un proyecto elaborado para la reparación definitiva y se ha presentando al Consell de Mallorca a la espera de la financiación necesaria que, "nos han asegurado, no tardará al llegar", indica el responsable municipal. El proyecto supone 140.000 euros y se centra en la construcción de una plataforma sobre la sima. "Ya se han determinado los puntos para el anclaje y, para entendernos, construiremos una gran viga bajo el camino", informó Torrens