La asociación de madres y padres de alumnos (Amipa) del instituto de Binissalem ha denunciado la “falta de profesionalidad” de la empresa de transporte escolar que diariamente lleva hasta el centro escolar a los alumnos que residen en los municipios vecinos de Consell y Alaró, hasta el punto de “poner en peligro” a los estudiantes del instituto binissalemer, que “tienen más posibilidades de padecer una desgracia que los de cualquier otro centro de la isla”.

Los miembros de la Amipa aseguran que vienen denunciando esta situación desde hace tres años ante la conselleria de Educación, que “inexplicablemente ha renovado dos más la contratación de esta empresa”.

Los madres y padres explican que desde que la empresa Garfra asumió la responsabilidad de trasladar a los alumnos de Alaró y Consell al IES Binissalem "las quejas tanto de los alumnos como de los padres se han disparado”. Hablan de “faltas de respeto” por parte de un conductor, alumnos sentados en el suelo del bus y de vehículos que llegan tarde o no vienen. “Ninguna de estas quejas fue lo suficientemente importante para la Conselleria, que ha decidido prorrogar el contrato”, lamentan.

Actualmente, la situación es “insostenible”, según aseguran, por los incumplimientos del contrato por parte de la empresa, que “no pone los tres buses de 54 plazas en cada uno de los municipios”. Por este motivo, “muchos alumnos se quedan en tierra y deben esperar un segundo viaje, con el retraso de entrada o salida que ello supone”.

Además, explican que muchos alumnos de 11 años “hacen cola desde las 7 de la mañana para asegurarse una plaza en el bus o bien van a pie hacia el instituto por una carretera que no tiene espacio para la circulación de peatones”. Aseguran que esta situación se produce tanto en la ida como en la vuelta y se preguntan quien asumirá la responsabilidad en caso de que se produzca una desgracia. “La Conselleria mira hacia otro lado, ya que el instituto deniega la conformidad del servicio desde hace tiempo”, concluyen.