Las tranquilas aguas de la Reserva Natural de s’Albufereta, en el municipio de Pollença, tienen desde hoy un inquilino tan especial como delicado. Se trata de la cerceta pardilla (Marmaronetta angustirostris), conocida en catalán como ‘rosseta’, un pequeño pato cuya especie está en peligro crítico de extinción en el Estado español. Los responsables de la conselleria de Medio Ambiente, del Cofib y del parque natural de s’Albufera han soltado hoy treinta ejemplares de ‘rosseta’, entre los que hay trece hembras y diecisiete machos.

La cerceta pardilla ingresó el pasado año en el listado de especies que corren un serio peligro de extinción. Está incluida en el Plan Homeyer de recuperación de especies acuáticas que se ejecuta en Balears desde el pasado año 2008, aunque la situación actual de esta familia de patos no invita al optimismo. “Las últimas informaciones disponibles señalan que la especie se encuentra en un riesgo inminente de extinción”, lamenta el Govern, que confía en que los ejemplares introducidos en s’Albufereta puedan reproducirse y contribuir de esta forma a corregir la cruel estadística.

Los treinta ejemplares soltados en el pequeño humedal nacieron entre los meses de mayo y junio de este año en el zoológico de Colonia y en el Tierpark de Berlín. Por este motivo, en el acto de suelta de ayer también ha estado presente Matthé Groot, especialista en anátidas del zoo de Colonia.

La conselleria de Medio Ambiente y Territorio destaca que de esta forma “se consolida” la línea de colaboración establecida en los últimos años con zoos ubicados en el continente europeo. Los dos equipamientos citados mantienen un compromiso para la recuperación de la ‘rosseta’ con un programa de cría que les permite ceder ejemplares a otros proyectos de recuperación de la especie.

Los ejemplares de esta especie de pato que ya nadan por las aguas de s’Albufereta han sido identificados con anillas oficiales para realizar un seguimiento y conocer de esta forma el proceso de adaptación en nuestros espacios naturales. El Govern destaca que la ‘rosseta’ está experimentando un “crecimiento sostenido” en Balears.