En el recinto portuario de Cala Rajada se celebró ayer la decimoctava edición de la Mostra de la Llampuga. En esta ocasión en el total de 22 estands de comida se cocinaron, de diferentes maneras, unas dos toneladas de este pescado, capturadas íntegramente en Cala Rajada.

Así se pudieron degustar platos tradicionales como la llampuga con pimientos, escabechada o con tumbet. También platos más elaborados como burritos de llampuga, llampuga con cebolla caramelizada o Quiche de llampuga, entre otros. Aunque la novedad de este año estuvo en la Llampurguesa, una hamburguesa de llampuga, dentro de un pan de diferentes clases, elaborado con tomate, albahaca, maíz o tinta de calamar, permitiendo elegir variedad y dándole una gran vistosidad y colorido a los platos.

Quienes tampoco faltaron a la cita fueron los tradicionales platos de arroz o fideuá de llampuga, elaborados por los pescadores de la cofradía local.

Las dependencias portuarias se llenaron de visitantes que se acercaron este fin de semana a degustar las exquisiteces culinarias de la llampuga, visitantes venidos de toda la isla e incluso turistas, que hacen coincidir sus vacaciones con el fin de semana del pescado fresco, que se inicia el viernes por la noche, con la Nit de tapes, pasando por la verbena marinera del sábado noche, donde se sirvieron más de un millar de raciones de paella y finalizando el domingo con la celebración del acto central de la Mostra de la llampuga.

La muestra también sirvió para rendir homenaje a tres estands que vienen participando desde la primera edición: el hotel Canyamel Park y Viva, junto con la cofradía de pescadores, con el chef Joan Ramon Esteva al frente.

Dos de los cocineros muestran varias 'llampurguesas'.

También hubo un reconocimiento para los hoteles afectados por la quiebra de Thomas Cook, que a pesar de ello han querido seguir participando. En esta ocasión la mostra estrenaba patrón mayor de la cofradía, Pep Uceda.