El Servicio de Limpieza del Litoral del Govern, dependiente de la Agencia Balear de la Calidad Ambiental y del Agua (Abaqua), ha retirado en quince años más de 700 toneladas (703.320,93 kilos) de plásticos del mar cercano a las islas, lo que supone un 31,44% de los 2.236.825,9 kilos totales de residuos. Desde que se puso en marcha el servicio, en 2004, hasta el 2018 el plástico representa el 59,83% de todo lo que se ha recogido durante las dieciséis campañas en las que el servicio ha funcionado hasta ahora. Este año han sido 30 las embarcaciones que han recogido, a fecha de 24 de septiembre, 64.154,24 kilos, de los que un 48,3% han sido plásticos (31.018,26).

El conseller de Medio Ambiente y Territorio, Miquel Mir, quiso dar a conocer estos datos ayer en el puerto de Porto Cristo en el marco de la Semana por el Clima. "Vencer la lucha contra los plásticos es capital para asegurar, no sólo la conservación del mar, sino del planeta entero", aseguró.

Mir valoró también "la enorme e impagable tarea hecha" por el Servicio de Limpieza del Litoral, único en su tipología en el Mediterráneo. Con todo, admitió que el esfuerzo de Balears en solitario es insuficiente para garantizar su conservación. Es por ello que confirmó que reclamará al Estado y a la Unión Europea "una mayor implicación en la lucha contra los plásticos".

En este sentido, Mir recordó que, según la organización ecologista WWF, España es el segundo país europeo que más plásticos vierte al Mediterráneo. "Nadie puede rehuir su responsabilidad en una situación tan grave", concluyó.

El conseller indicó que retirar plásticos del mar no es suficiente, sino que hay que evitar que estos lleguen a parar ahí. Destacó como Balears se situaron, durante la pasada legislatura, a la vanguardia en la lucha contra el plástico con la aprobación de la Ley de Residuos. Sin embargo, lamentó que ésta fuera impugnada por el Gobierno central. Una disputa que debería ser resuelta en pocas semanas en la Comisión bilateral.

Mir alentó a participar en las diversas concentraciones convocadas para mañana y reconoció el papel que tiene ahora la juventud en el auge del debate sobre cómo afrontar el cambio climático. "Es incuestionable el contexto de emergencia climática en el que nos encontramos".

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