Pep Lluís Pons, alcalde de Búger, planteará a la junta local de Més la opción de presentar la dimisión ante la postura de "bloqueo que mantiene la oposición". El alcalde indica que también se barajará la posibilidad de repartirse tareas entre los concejales de su partido a la espera de ver "que postura adoptan PP y PSOE en los próximos plenos".

Las palabras de alcalde son la consecuencia del resultado del pleno celebrado anoche. En dicha sesión se proponía la aprobación de una dedicación exclusiva para Oscar Castro, teniente de alcalde. Se trata de una plaza cuyo coste abona el Govern y que asciende a unos 40.000 euros anuales. La oposición votó en contra de la propuesta. Esto supone continuar con una situación de atención al público muy precaria ya que el alcalde ostenta un cargo en el Govern y atiende sólo un rato por las mañanas.

Cabe explicar que en las pasadas elecciones, el vencedor fue el PSOE con cuatro ediles; Més obtuvo tres y el PP dos. En la investidura, el PP, apoyó por sorpresa la candidatura de Més con lo que Pons se hizo con la vara municipal con una minoría muy precaria.

La decisión del alcalde dependerá de lo que suceda el próximo 30 de septiembre. Para esa fecha se prevé la celebración de un pleno extraordinario para aprobar los presupuestos municipales. Cabe explicar que en la actualidad el Ayuntamiento gestiona los presupuestos prorrogados de 2018. Eso hace que se mantenga una deuda de 20.000 euros, pendiente de abonar porque no existe una partida presupuestaria donde computarla.

Si no prospera la aprobación de los presupuestos cabría la posibilidad de la dimisión o plantear una moción de confianza "porque no creo que se decidan a ponerme una moción de censura", ironiza el alcalde. Pons agrega que "lo que está claro es que quieren bloquear. Yo sé que han hablado y desde Palma les están dirigiendo. El PSOE quiere la alcaldía.

PP y PSOE explicaron su voto manifestando que Pons no ha intentado negociar.