La basílica del Santuario de Lluc acogió la noche del sábado la despedida de quienes durante años han formado parte de la escolanía de Lluc y que por motivos de edad deben dejarla una vez finalizados sus estudios de ESO.

Además en el transcurso de la misma celebración se dio entrada a los nuevos blauets que durante el pasado curso se han incorporado al coro. En esta ocasión lo han hecho dos ya que por motivos de edad algunos de ellos tendrán que esperar para hacerlo.

El padre Ricard Janer presidió el acto litúrgico de la imposición de la sotana azul que identifica desde hace varias décadas a los integrantes de la escolanía. Este acto tanto para el alumnado que abandona el Santuario como para quienes reciben la sotana que los identificará como blauets se convierte para las familias, la comunidad religiosa y quienes integran la escolanía en el acto más deseado de cuanto tienen lugar durante el año en Lluc.

En el transcurso de la ceremonia se leyeron diversos pasajes bíblicos y se pidió a los nuevos integrantes si deseaban servir a la Virgen durante sus años de permanencia en el Santuario. Mientras que para quienes dejaron el mismo se les agradecieron los servicios prestados durante estos años en nombre de todo el pueblo de Mallorca, ya que la escolanía es todo un símbolo de la isla. Como recuerdo quienes finalizaron recibieron una medalla de la virgen y sus familiares fueron obsequiados con una imagen.