Vilafranca de Bonany coronó ayer otra vez a Miquel Morlà como el 'Rey de los Melones' de la localidad, confirmando su dominio en el certamen del Meló més Gros de la Fira. El ejemplar que presentó pesó 20 kilos y 90 gramos, imponiéndose a los otros participantes.
El récord del concurso lo ostenta el propio Morlà, quien el año pasado concurrió con un melón de 22,5 kilos. En la categoría de Meló de Qualitat, se hizo con el triunfo Jaume Sansó. En ambos casos, el primer premio estaba dotado con 250 euros. La jornada festiva de ayer estuvo repleta de actividades para las personas que se acercaron a la muestra de Vilafranca, empezando por los diferentes tipos de expositores (motos antiguas, animales, artesanía, maquinaria agrícola, entre otros productos) y siguiendo por juegos infantiles y la actuación de los Castellers de Llevant en la plaza Mayor.
El sábado, destacaron otros eventos como el Firó Nocturn y una exhibición ecuestre en el Parc Josep Maria Llompart. El acento artístico lo puso el Meló Art, y el patio de la Rectoria Vella acogió una sesión de microteatro.
