El sur de Mallorca tardará aún días o semanas en recuperarse de la irrupción de la gota fría del pasado martes. Municipios como Santanyí, Ses Salines y Campos se despertaron este miércoles con el panorama desolador que provocaron las fuertes precipitaciones que en algunos puntos dejaron hasta unos 100 litros por metro cuadrado en tan solo una hora.
Santanyí fue la localidad más afectada, ya que el temporal causó una caída del sistema eléctrico que dejó sin luz a unos 800 vecinos de Cala Llombards, Cala Santanyí y Cala Figuera. La alcaldesa Maria Pons (PP) informó de que en Cala Llombards cayeron nueve transformadores, que tuvieron que ser reestablecidos.
A partir de la información que le suministró Endesa a Pons, la previsión era que el suministro se fuera recuperando entre la tarde de este miércoles y el jueves.
El alcalde de Ses Salines, Joan Rodríguez (PP), enumeró los daños que dejó el temporal en la Colònia de Sant Jordi. Por ejemplo, indicó que hay aún muchos árboles derribados por el viento. También se han tenido que cortar calles por el riesgo de caída de postes de electricidad.
Balaustradas, tejas, sombrillas fijas, toldos y vidrieras también se vieron dañadas. "Las pluviales no dieron abasto, pero hubiera podido ser peor si no hubiéramos actuado hace un mes limpiando todos y cada uno de los desagües de la calle", manifestó.
La brigada municipal calculó que una veintena de sótanos quedaron inundados con un nivel de agua de aproximadamente un metro. "Todavía tenemos localizadas cinco embarcaciones encalladas. Poco a poco se irán retirando, por mediación de lo seguros", dijo Rodríguez.
El alcalde de Ses Salines deseó la pronta recuperación de los heridos leves por el temporal, sobre todo, personas que estaban en embarcaciones. "Sabemos que han pasado nervios y una mala noche. Todo el mundo que quiera puede llamar al Ayuntamiento si necesita más ayuda", dijo.
La Policía Local y la brigada habían organizado ya un dispostivo a partir de las dos de la tarde del miércoles. A las tres, ya se había habilitado un puesto de mando en el centro cívico de la Colònia de Sant Jordi. En Ses Salines, se recogieron 71 litros por metro cuadrado en una hora, y en la carretera con la Colònia, 67 litros.
Sa Ràpita
La alcaldesa de Campos, Francisca Porquer (PP), hizo también balance de los daños. Así, en el litoral, refirió los destrozos sufridos por un restaurante de sa Ràpita. Sus mesas, sus sillas y su toldo resultaron afectados. Igualmente, en es Trenc, quedan todavía cuatro grandes embarcaciones varadas. "Fue un gran susto el que nos llevamos", declaró. Todos los alcaldes agradecieron la presencia de Bombers de Mallorca, Protección Civil y fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.
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