Las predicciones se han cumplido en Deià, que ya ha empezado a aplicar restricciones de agua para hacer frente a la severa sequía, una sequía que se agrava con el aumento poblacional que experimenta durante los meses de verano. El alcalde Lluís Apesteguia ha enviado un bando municipal urgente para alertar a los vecinos que prohíbe el uso de agua potable para llenar piscinas, lavar coches, terrazas o fachadas o regar jardines. Son las primeras resticciones pero no se descarta que, si la grave situación empeora, se incrementen las medidas tomadas para afrontar la dura sequía sin descartar posibles cortes del suministro.

El primer edil explica que la captación de agua de la fuente de Es Molí y del Pou del Verger ha disminuido de forma preocupante hasta el punto de precisar una "creciente cantidad" de camiones de agua. De momento, el municipio ahora ya requiere la aportación de doce camiones diarios.

A finales de junio, que fue cuando se vieron obligados a recurrir a la aportación externa de agua, el número de camiones que abastecían Deià era de cinco. La cifra, avisa el alcalde, varía según las necesidades. Y es que la sequía combinada con el incremento poblacional que sufre en estas fechas (pasa de una población de 400 personas en invierno a 2.000 en verano) conforman la tormenta perfecta.

De momento y hasta nuevo aviso, el suministro de agua será el habitual pero el Ayuntamiento deja claro que habrá sanciones para los consumos abusivos e injustificados de agua pudiéndose incluso retirar temporalmente el contador.

En el bando municipal se insta a los habitantes a seguir ciertas medidas ahorrativas, por ejemplo, lavar las frutas y verduras en un bol y utilizar el agua para regar. Otras acciones son: poner la lavadora y el lavaplatos a carga completa; optar por duchas; recolectar en un cubo el agua fría que se acumula mientras uno espera que salga caliente a la hora de ducharse y utilizarla para fregar o regar las plantas; cerrar el grifo mientras se lavan los dientes ya que se pueden llegar a consumir 12 litros por minuto o utilizar también para riego el agua condensada del aire acondicionado.

De cinco a doce camiones diarios de agua en tres semanas

A finales de junio Deià dio la voz de alerta de que la sequía y el aumento poblacional que sufre en verano eran la tormenta perfecta, una tormenta que obligaba a traer agua en camiones. El municipio empezó con cinco diarios que ahora ya son doce. No se descarta un nuevo incremento. De momento, un bando municipal urgente avisa de las primeras restricciones de agua y sugiere medidas ahorrativas a los vecinos.

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