El partido Izquiera Unida de Calvià denunció ayer ante el consistorio el gran incremento de los robos que ha habido en el municipio, especialmente en zonas como la conocida Costa de la Calma.

Así, trasladaron esta preocupación al Ayuntamiento, con el alegato de que la seguridad es "nula" o insuficiente, según el partido. Su denuncia viene por los numerosos hurtos que ha habido últimamente en los domicilios privados.

Los vecinos, hartos

Vecinos de la calle sa Madona, una de las más habitadas de la zona, se quejan de la inseguridad reinante en la calle que ha provocado que en los últimos días haya habido varios robos e intentos de robo.

Por su parte, el coordinador de la asamblea local de Calvià, Alfonso Rodríguez, lamentó profundamente que, a pesar de las reiteradas denuncias de los vecinos, la presencia policial es "mínima", lo que está provocando que 'los amigos de lo ajeno', los ladrones, "campen a sus anchas". Rodríguez expresó su preocupación porque la zona "se está degradando en los últimos meses y se nota la falta de interés del consistorio por la misma". Hace algunos meses se realizaron algunas obras de mejora. Sin embargo, "siguen aumentando los problemas de limpieza o de seguridad, entre muchos otros".

Los quads, a tener en cuenta

La dirección de Izquierda Unida en el municipio de Calvià también denunció la proliferación de excursiones diarias de las motocicletas de cuatro ruedas, conocidas como quads, además de otros vehículos por las principales calles del núcleo costero.

Los robos en la zona no es algo nuevo. En 2016 se desmanteló 'la banda del taladro', que eran en su mayoría albaneses, acusada en su momento de más de cien robos en la Costa de la Calma de Calvià.