Los refugios donde muchos turistas y visitantes locales pasan parte de sus vacaciones en plena naturaleza del Parc Natural de Llevant, en el municipio de Artà, siguen cerrados y sin una fecha clara de reapertura. Los graves destrozos provocados por la torrentada que azotó la comarca el pasado 9 de octubre, han hecho que si bien los caminos que llevan a los refugios puedan transitarse a pie, carezcan de las medidas de seguridad oportunas.
Eso quiere decir que la conselleria de Medio Ambiente no quiere arriesgarse a reabrir las rutas sin que antes operarios del Govern limpien y verifiquen que, en caso de que pudiera suceder un accidente, tanto ambulancias como otros transportes de emergencia puedan llegar a los enclaves sin dificultades.
Socavones, troncos u otros restos de materiales arrastrados por la riada que golpeó sobre todo la zona de Sant Llorenç y la costa de Artà, han hecho que desde entonces los refugios deban ser clausurados hasta nueva orden. No porque en si mismos estén en malas condiciones sino por el peligro de accidente y falta de ayuda asociados al mal estado de algunas de las comunicaciones internas del parque.
A mediados de octubre del año pasado, tras la torrentada, la conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca ya recomendó "precaución a la hora de llevar a cabo actividades" en el parque por la peligrosidad que presentaban algunas zonas y la inaccesibilidad a otras.
Los caminos afectados son los de s'Alqueria Vella a s'Arenalet d'Aubarca, el de s'Arenalet a es Oguers, el camino de s'Esquena Llarga, el camino de Son Puça, el acceso a s'Alqueria Vella de Dalt y el camino a Tudossa.
En los caminos que se encuentran intransitables, también están afectadas las tareas agrícolas y ganaderas, las tareas de prevención y extinción de incendios, así como la gestión de los valores naturales del parque.
Las tareas necesarias para rehabilitar los caminos son la estabilización del terreno, las mejoras en el drenaje, y la revisión y sustitución de las conducciones de agua que hay en algunas vías, entre otras cosas, según el Govern.
Demanda
Las estancias en los refugios de Mallorca superaron en 2018 los 44.000 usuarios, una cifra que confirma el interés creciente de un turismo medioambiental, que busca la tranquilidad, el deporte al aire libre o por el senderismo. En Mallorca hay un total de dieciocho albergues, seis de ellos gestionados por el Consell y otros doce por el Govern, con un protocolo de reservas bastante estricto por la gran demanda.
Según Medio Ambiente, los refugios del Govern alcanzaron las 14.155 pernoctaciones. Los más demandados son precisamente los tres que están ubicados en el Parc Natural de Llevant (Alzina, s'Arenalet d'Aubarca y Casa dels Oguers) que registraron casi la mitad de las estancias con un total de 5.134 usuarios. El refugio de s'Arenalet d'Aubarca es uno de los preferidos por tener la playa a escasos metros y por contar con rutas atractivas de senderismo. En 2018 tuvo un total de 3.651 estancias hasta octubre.
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