Porreres dispondrá, entre 2019 y 2020, de una balsa de riego financiada por el impuesto de turismo sostenible con un coste de algo más de dos millones de euros y una primera fase de construcción que durará nueve meses.

La conselleria de Medio Ambiente aprobó ayer el proyecto de aguas de Porreres, que tiene por objeto definir las obras y actuaciones a llevar a cabo para regenerar y reaprovechar las aguas producidas en la depuradora para el riego agrícola. Actualmente estas aguas son vertidas a torrentes o pozos de infiltraciones. La empresa que se encargará de ejecutarlo será TRAGSA. En una segunda fase se llevarán a cabo las obras de captación y estación de bombeo.