El ayuntamiento de Inca y Càritas Diocesana de Mallorca han llegado a un acuerdo de colaboración para el proyecto de comedor social que gestiona la ONG en Inca. Virgilio Moreno, alcalde de Inca y Sebastià Serra, director de Càritas, han firmado el documento de la subvención. De este modo, la entidad social recibirá una subvención de 100.000 euros, lo que supone un aumento de casi el 40% respecto a los últimos cuatro años. "Esta colaboración es importante para el servicio de calidad que se da a la ciudadanía", dice Pons.

Cabe recordar que el comedor social de Inca, gestionado por Càritas Diocesana de Mallorca atiende cada día a unas 115 personas. La mayoría de usuarios son de la tercera edad y familias extranjeras regularizadas. El local situado en la calle de Son Odre de la ciudad, inició el pasado año un proyecto que consiste en una reforma integral del comedor social con el fin de cumplir la normativa del Consell para estas equipaciones.

También, se tiene la intención por parte de la entidad dependiente de la iglesia católica de habilitar seis viviendas en el mismo inmueble. El objetivo de la iniciativa será poder ofrecer un alojamiento alternativo a las personas que lo requieran.