El ayuntamiento de Escorca ha puesto en marcha la ejecución del proyecto de ampliación del pantalán para embarcaciones de Cala Tuent, una actuación que, según el alcalde Antoni Solivellas (PP) estaba prevista desde hace tiempo por cuestiones de seguridad. El pantalán que es objeto de reforma es utilizado por las golondrinas turísticas y otras embarcaciones para que el pasaje pueda acceder a la cala.
El alcalde de Escorca explica que la ampliación del pantalán solo afectará al grueso de la estructura y no a la longitud. "Hacía tiempo que el pantalán estaba en mal estado y de hecho se han producido algunos accidentes debido a las malas condiciones que presentaban las maderas", apunta Solivellas.
Antes de ejecutar la obra, el ayuntamiento de Escorca solicitó los correspondientes informes a la demarcación territorial de Costas y a la conselleria de Medio Ambiente del Govern, que han sido favorables a la ejecución del proyecto debido a que no se prevén nuevos impactos ambientales ni paisajísticos en esta zona de máxima protección de la Serra de Tramuntana.
El objetivo de la institución municipal es terminar las obras antes del inicio de la temporada turística alta. Según el alcalde, la obra no es complicada y podrá terminarse dentro del plazo previsto. El presupuesto de la reforma del pantalán asciende a 40.000 euros procedentes de los fondos municipales.
Además, Solivellas apunta que el pantalán de Cala Tuent "es considerado una salida de emergencia en caso de que deba producirse una evacuación por incendio forestal, por lo que es importante que esté en buenas condiciones".
La presencia de materiales de obra en la zona ha provocado una cierta alarma entre diferentes personas que han visitado Cala Tuent en los últimos días, pensando que se estaba construyendo una nueva estructura en "una de las últimas playas vírgenes de la Serra".
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