Llucmajor no quiere ver más coches abandonados en sus calles. O al menos eso es lo que se desprende de la campaña realizada estos días por la Policía Local en la que se han detectado hasta 73 vehículos dejados en la vía pública.

Se trata de una actuación sobre el terreno en la que han participado 26 agentes del cuerpo de seguridad local, que han ido patrullando las distintas poblaciones, urbanizaciones y polígonos del municipio en busca de coches cuyo dueño se ha deshecho de ellos en la calle, sin tener que pasar por los trámites administrativos y de descontaminación obligatorios.

Según apunta el propio consistorio llucmajorer todos los propietarios de los utilitarios ya han sido notificados e informados de la obligación de retirar inmediatamente sus vehículos, una vez se ha constatado su abandono. En caso de no hacerlo deberán pagar los 85 euros del precio de transporte de la grúa, más otros diez por cada día que el coche esté en custodia municipal sin que haya sido reclamado. A estas cantidades hay que sumarle, evidentemente las sanción por abandono del vehículo en la vía pública, y que está estipulada según la ordenanza municipal en 200 euros, cantidad que se reduce al 50% si se abona durante los primeros días.

Por lo que respecta a la localización, de los 73 coches localizados y expedientados, la mayoría, 24, están abandonados en las calles de la localidad costera de s'Arenal. Dieciséis en la ciudad de Llucmajor y once en el polígono de Son Noguera. El resto se reparten entre los demás núcleos y urbanizaciones del término municipal.