El pasado temporal de lluvia y viento que azotó hace más de una semana el litoral del este de Mallorca, también se cebó en la playa y el paseo marítimo de Calas de Mallorca (la zona hotelera del municipio de Manacor), donde además de arena se llevó abundantes trozos de la pared que separa el paseo del acantilado que da directamente al mar.

Numerosos vecinos han protestado estos días por lo que dicen se trata de una dejadez por parte de las administraciones, dada no solo la mala imagen sino los problemas de seguridad que esta situación puede causar, con trozos de piedra y muro arrancados sobre el asfalto.

Por su parte el ayuntamiento de Manacor ha confirmado que ya se han instalado barreras de seguridad para acotar el espacio afectado, y que técnicos municipales ya han redactado un informe con material fotográfico y se lo han remitido a Demarcación de Costas, responsable de la zona.