El bar que este año se ha quedado sin terraza en la zona portuaria del Port de Sóller ha recibido el apoyo de 930 firmas que los dueños del establecimiento han entregado al organismo del Govern que regula la actividad portuaria para intentar un cambio de criterio que les permita colocar mesas y sillas en la vía pública.

El dueño de Can Tambora explicó ayer que el pliego de firmas ha sido depositado en Ports para pedir que este organismo vuelva a reestructurar las terrazas para que su establecimiento pueda volver a tenerla. A principios de este año Ports reestructuró la distribución de las terrazas de la calle Marina mediante la cual Can Tambora se quedó sin ocupación de vía pública.

El organismo público aplicó el criterio de la proyección de la fachada, algo que perjudicó al bar que regenta Javier Moragues, que estos días ha tenido que despedir "con indemnización incluida", explicó, a dos trabajadores "y otros tres están esperando" como consecuencia del descenso de actividad de su negocio. El dueño del bar lamentó el "grave perjuicio económico" que la retirada de la terraza le está causando. Por lo que se refiere al estado de la cuestión de fondo, Moragues explicó que "todavía no tenemos respuesta, ya que nos dicen que están estudiando el caso". El problema reside en que la proyección de su fachada (al otro lado de la calle) es una acera en la que los técnicos de Ports no quieren que se instalen terrazas, al considerarla zona de paso de viandantes entre la calle Marina y el muelle comercial.

Para Moragues, lo más sorprendente es que "en febrero nos autorizaron de palabra que podríamos ocupar 36 metros cuadrados de esta zona, aunque después dieron marcha atrás y lo rechazaron". Fuentes próximas a Ports informaron de que el tema efectivamente sigue en estudio.