Un grupo de alumnos del taller de Compensatoria del departamento de Orientación del IES Puig de Sa Font de Son Servera, están construyendo una especie de voladizo de madera de unos 20 metros de longitud por unos tres de ancho sin ninguna clase de permiso, pese a que la estructura está anclada a uno de los bloques del centro de secundaria, lo que ya ha sido denunciado internamente por parte del profesorado del instituto.

Según las críticas de parte de la comunidad educativa, para poder construir esta clase de estructuras hay que contar de forma ineludible con un permiso visado por parte de un arquitecto y pidiendo la oportuna licencia al Ibisec, la empresa pública encargada de obras en cualquier centro docente público de Balears.

El sindicato CCOO ya lo ha puesto en conocimiento de Educación, que aún no se ha pronunciado al respecto. También del Ayuntamiento y evidentemente de la dirección del centro. Aquellos que han alzado la voz de alarma se quejan de la peligrosidad que una estructura así puede suponer si no se realizan los cálculos adecuados, y sin tener la supervisión reglada.

Así como de la falta de supervisión por parte de celadores municipales al respecto. "En una comunidad donde las irregularidades urbanísticas están a la orden del día, no es lo más conveniente que las malas prácticas ya se enseñen desde el instituto".