El gobierno municipal socialista de Calvià respiró ayer al aprobar los presupuestos de 2019, después de la mala experiencia del año pasado, en que tuvo que prorrogarlos por la falta de apoyos. En esta ocasión, el PSOE sumó a Sí Se Puede, Esquerra Oberta y a la concejal no adscrita para sacar adelante las cuentas, que ascienden a 96,1 millones de euros. PP y Ciudadanos (Cs) votaron en contra.
“Son unos presupuestos progresistas, concebidos para conseguir una vida mejor para nuestros vecinos. Unos presupuestos que sitúan a las personas en el centro de nuestras políticas”, argumentó el teniente de alcalde de Economía, Marcos Pecos (PSOE), que defendió el proyecto presupuestario junto al alcalde Rodríguez Badal.
Pecos incidió en los casi tres millones que se destinarán a la cohesión social (de los cuales 82.000 euros irán para el servicio de comida a domicilio para mayores); en los 150.000 euros para ayudas al alquiler; en los 100.000 euros para becas y en las subvenciones para entidades sociales y de cooperación, entre otras partidas.
El bloque conservador arremetió contra unas cuentas que, según subrayó el portavoz del Grupo Popular, José Manuel Ruiz, “no aportan absolutamente nada”. Ruiz censuró el retraso de la tramitación presupuestaria y consideró que su definitiva aprobación se debe al “nerviosismo” de la izquierda ante las elecciones.
Sin rebaja fiscal
En un tono duro, el edil de Cs, Carlos Tarancón, dijo que estos son los presupuestos de la “improvisación”. Tarancón acusó al gobierno municipal de “pegar un sablazo” a los vecinos al “no bajar ni un solo impuesto” pese al buen comportamiento de la recaudación en los últimos años.
Desde el flanco izquierdo del pleno, las diferentes intervenciones fueron más conciliadoras e incidieron en la aceptación de sus propuestas por parte del equipo de gobierno. Así lo expresó el portavoz de Esquerra Oberta de Calvià (EOC), Alfonso Rodríguez Sánchez, quien se felicitó por las mejoras en el merendero de Son Ferrer y el local vecinal de Costa de la Calma.
Desde Sí Se Puede, Fer Alcaraz enumeró también sus propuestas aceptadas, como el Casal de Dones o el nuevo ‘skate park’ de la urbanización Galatzó. Por su parte, la concejal no adscrita, Isabel Manresa, destacó la importancia de “humanizar los presupuestos” para acercarlos a las necesidades de los “más desfavorecidos”.
