El Consell de Mallorca incorpora a su inventario el Camino Viejo del Faro de Formentor. Se trata de un camino de 10,312 kilómetros lineales que se integrará a la etapa 8 de la Ruta de Pedra en Sec (GR 221), que tiene como apoyo principal la red de antiguos caminos restaurados por el Consell. Actualmente hay señalizados y abiertos 168,4 kilómetros.

Esta ampliación de la red pública ha sido posible gracias a la cesión gratuita por parte del Ministerio de Hacienda. El presidente del Consell de Mallorca, Miquel Ensenyat, sostuvo ayer durante una visita que la cesión del camino logra diferentes objetivos del gobierno insular, "asumir la titularidad del camino, no solo nos permite garantizar su conservación. Se trata de un hito que va más allá de preservar nuestro patrimonio: hacerlo accesible a todo el mundo y hacer valer un modelo territorial basado en la sostenibilidad".

Con la incorporación del Camino Viejo del Faro de Formentor, el Departamento de Medio Ambiente quiere mejorar su estado actual, que en algunos tramos está bastante mal, y garantizar una buena señalización. De hecho, según la consejera insular de Medio Ambiente, Sandra Espeja, "aunque en algunos tramos está perfectamente conservado, en otros, el paso del tiempo lo ha hecho intransitable. Por eso desde ahora mismo encargaremos un proyecto para su restauración".

En el año 1857 la Comisión de Faros, un órgano dependiente del Estado, inició la construcción del camino que unió Cala Arrayán y el cabo de Formentor para la construcción de un faro en su punto más septentrional de Mallorca. El camino fue acabado dos años después y en 1863 el faro se iluminaba por primera vez.