El conflicto existente entre el cura de es Capdellà y un grupo de fieles de esta localidad por la supresión de los servicios religiosos habituales y por los impedimentos para sacar en procesión la talla de Sant Sebastià llega al salón de plenos de Calvià.
La concejal no adscrita, Isabel Manresa, presentará en la próxima sesión plenaria ordinaria -prevista para el jueves de la semana que viene- una moción en que insta al Ayuntamiento a que reclame al Obispado y a la Archidiócesis Provincial que busque una solución ante este distanciamiento.
Un conflicto que se evidenció con toda su intensidad durante el pasado día de Sant Sebastià, el 20 de enero, cuando el Obispo de Mallorca, Sebastià Taltavull, mantuvo una discusión subida de tono con algunos de los feligreses de la parroquia al acabar la misa en honor al patrón del pueblo.
"Los intentos [de diálogo] que se han llevado a cabo entre los propios vecinos y el Obispado parece que han terminado en crispación por ambas partes. Y consideramos que, si bien no es competencia del Consistorio, todo lo que afecte a su ciudadanía no puede dejar de ser de su incumbencia", argumenta Manresa en la moción que presentará.
Sin servicios religiosos
La iniciativa plenaria incide en la necesidad de restablecer los servicios religiosos, que se dejaron de realizar tras el cierre de la parroquia, como pueden ser los funerales. Actualmente, los vecinos tienen que desplazarse a Calvià vila para asistir a misas y a funerales de vecinos del pueblo.
Residentes de es Capdellà se han quejado de que esta circunstancia supone un problema añadido para una población especialmente envejecida que tiene problemas de movilidad. "La población de es Capdellà siempre ha contribuido de forma muy activa en el desarrollo y mantenimiento de sus tradiciones religiosas en todas las formas posibles", sostiene la moción, que llama a "respetar" esa actitud, lo que "la institución eclesiástica no está haciendo".
En consecuencia, la edil no adscrita pide el Ayuntamiento que medie para que se implanten las "soluciones pertinentes que lleven al restablecimiento de los servicios religiosos habituales" en la iglesia de es Capdellà.
Otro de los frentes abiertos entre la parroquia y un grupo de fieles es el uso de la talla de Sant Sebastià para la procesión del patrón de la localidad. Como la parroquia no cede la estatua, los vecinos han sacado en los últimos años para el acto un cartel con la imagen del santo.
