El Firó de esta próxima primavera vendrá de la mano de algún cambio en su organización, como la reducción a un kilo de pólvora la que podrán llevar los 'trabucaires' que participarán en las batallas.

La sala de plenos del ayuntamiento de Sóller acogió ayer la reunión de la junta local de seguridad en la que se trazaron los ejes del dispositivo de seguridad que se desplegará en el municipio con motivo de la celebración del Firó. La reunión estuvo presidida por Rosario Sánchez, la delegada del Gobierno en las islas, en la que también participaron responsables del ayuntamiento, la Guardia Civil, la Policía Local y Protección Civil.

Uno de los temas que se abordaron en la reunión fue el de la aplicación de la nueva normativa en materia de explosivos y pirotecnia que supone establecer límites en el uso de la pólvora negra que se utiliza en los disparos de un cañón, trabucos y espingardas.

Según explicó la concejal de Cultura de Sóller, Laura Celià, la norma "solo posibilitará que cada 'trabucaire' pueda llevar un kilo de pólvora", algo que reducirá a la mitad el uso de este material en comparación a años anteriores en los que se adquirían hasta 40 kilos de pólvora.

El ayuntamiento dispone de 15 trabucos y 4 espingardas (armas de época).

Los usuarios de estas armas deberán usar los nuevos dosificadores de pólvora que les subministrará el ayuntamiento, precisó la concejal.

Edición de 2018

En los próximos días, Delegación del Gobierno, Policía y Guardia Civil celebrarán otra reunión técnica en la que nuevamente se abordará el uso de la pólvora en el Firó. En la edición de 2018 los 40 kilos de pólvora negra que compró el ayuntamiento no pudieron utilizarse, ya que el municipio no consiguió todas las autorizaciones necesarias para el transporte y suministro de este peligroso material.