Un informe interno del propio ayuntamiento de Manacor concluye que la actividad del matadero municipal tiene numerosas deficiencias higiénicas y que su actividad "sin la colaboración de la empresa explotadora no es viable". El documento desvela, por ejemplo, la preocupación por la falta de un control sanitario óptimo y de gestión del centro de limpieza y desinfección de los camiones de ganado, eliminada desde hace unos meses.
En el informe, fechado a finales del pasado mes de enero, se explica asimismo que los servicios veterinarios oficiales de la dirección general de Salud Pública del Govern han emitido tres actas referentes a una auditoría de bienestar animal, una de APPCC y un control de los criterios microbiológicos. Y que además hay otras dos en marcha.
Tras estas primeras pruebas, de las cuales se evidencian "deficiencias graves que afectan al servicio del matadero", los técnicos de la conselleria de Salud ya han advertido a los responsables municipales que éstas supondrán "importantes sanciones económicas e incluso la posible suspensión de la actividad". La que sería la segunda en menos de un año, tras el parón obligado este verano por otros problemas sanitarios y de mantenimiento.
Los detalles prosiguen, admitiendo que en estos momentos "existe un grave problema sanitario, ya que no se puede asegurar un control óptimo de acuerdo con la normativa sanitaria en vigor". "Desde la reapertura del día 23 de agosto la empresa explotadora no lleva a cabo los puntos de autocontrol y otros, de los que hasta la suspensión de la actividad sí se había encargado y gestionado", indica el documento municipal, que finiquita que sin esta gestión la viabilidad del centro de sacrificio y despiece no es viable.
Una de las auditorías, la de bienestar animal, revela que no hay registros de la inspección y calibrado regular del equipo de aturdido, ni hay nombrado un encargado de ello. Tampoco existe una señal en cada corral que indique la hora y fecha de entrada de los animales, ni están bien estabulados, lo que supone que los responsables no pueden asegurar que se suministren alimentos a los animales "que no hayan sido sacrificados dentro de las doce horas siguientes a su llegada".
Los graves problemas del matadero fueron ya denunciados hace unos días por el portavoz de Volem Manacor, Carles Grimalt, quien alertó que "el informe afirma que no se puede asegurar un control de la normativa sanitaria, con lo que esto representa: el peligro de ofrecer a los distribuidores carne en malas condiciones, lo que puede poner en peligro la salud pública".
El consistorio manacorí se defiende alegando que "las auditorías y los controles rutinarios que regularmente pasan las instalaciones, han indicado algunos aspectos a mejorar y desde el Ayuntamiento y desde la empresa que se encarga del servicio trabajamos para garantizar el buen funcionamiento".
