Debido a las continuas quejas por parte de vecinos de la calle de sa Mantança, en Santa Maria, por los malos olores procedentes del alcantarillado, el consistorio ha llevado a cabo una actuación para solventar el problema. En un principio se creía que era un atasco causado por restos de cemento de alguna de las obras que se han llevado a cabo en la calle, junto con toallitas húmedas.

Al realizar la prospección a presión por parte tanto de la empresa de limpieza como de la brigada de obras, la sorpresa ha sido grande, ya que no han hallado restos de cemento, sino auténticos bloques. La limpieza de las tuberías continuará con este sistema, por parte del consistorio, en caso de que no se solventara el problema por quedar restos de estos vertidos, se tendrá que proceder a levantar la calle y al posterior cambio de las tuberías afectadas.

El alcalde ha manifestado que se pondrán en contacto con las empresas que hayan realizado obras en la mencionada calle para delimitar y exigirles las correspondientes responsabilidades. La responsable de este vertido en la red de saneamiento de la calle de sa Matança, en caso menor, deberá hacer frente al coste total de las obras de reparación.