Solo veinte de las 180 recolocaciones ofrecidas por la multinacional Cemex a los trabajadores afectados por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de la fábrica de Lloseta están ubicadas en Mallorca, por lo que la plantilla no ha aceptado la última propuesta de la empresa y confirma que el próximo lunes irá a la huelga en todos los centros de trabajo de Cemex en el Estado español. También se mantiene la concentración ante la embajada de México en Madrid.

Además, la última oferta de indemnizaciones a los trabajadores que se queden sin trabajo, consistente en el pago de 30 días por año trabajado con un máximo de 22 años y una cuota fija de 3.000 euros, tampoco convence a los trabajadores. "Está lejos de nuestras expectativas", señala Roberto Serrano, coordinador estatal de construcción de UGT.

Respeto a las recolocaciones propuestas por la multinacional, Serrano señala que son inviables porque la mayoría de trabajadores mallorquines deberían mudarse a la península o a otros países. "Además, estas plazas están ocupadas por trabajadores eventuales, por lo que aceptarlas también supondría la destrucción de puestos de trabajo", señala.

Los trabajadores todavía confían en alcanzar un acuerdo satisfactorio, ya que las negociaciones seguirán el martes y el miércoles, último día antes de que termine el plazo estipulado, que de momento no ha sido ampliado por la empresa a pesar de la solicitud realizada desde el gobierno central a instancias de los sindicatos.