A medida que avanzan las obras de reforma de la antigua pescadería de Pollença y del cuartel de la Policía Local anexo reforma de la antigua pescadería de Pollença y del cuartel de la Policía Local anexo se va confirmando la existencia de un antiguo cementerio islámico que hasta la fecha permanecía oculto bajo la vieja sede policial. Hasta ahora, las prospecciones arqueológicas han sacado a la luz los restos de cuatro personas cuyos enterramientos, según los arqueólogos, pertenecerían a la época islámica (902-1229).
Además, se espera que en los próximos días aparezcan otros cuatro esqueletos en la misma zona, ya que restan por sondear cuatro túmulos de piedras muy similares a los que ya se han excavado y bajo los que han aparecido los primeros cuatro cuerpos, uno de ellos perteneciente a un neonato. Por ahora, se desconoce si los restos arqueológicos se extienden más allá de lo que sería el antiguo cuartel de la Policía Local, cuya reforma está vinculada a la de la Peixateria. Ambos edificios están ubicados en la Plaça Major de Pollença.
"Ya podemos hablar de un cementerio, parece ser que los restos arqueológicos tienen un volumen importante y que el primer cuerpo que apareció hace unas semanas no era un entierro aislado", explica el regidor de Urbanismo, Tomeu Cifre Bennàssar (Junts Avançam).
Cabe recordar que hace varias semanas ya aparecieron en el mismo espacio restos de piezas cerámicas y otros elementos históricos de la época islámica como una moneda y una hebilla. El Ayuntamiento había contratado por su cuenta a una arqueóloga para supervisar las excavaciones que debían realizarse durante las obras de reforma ante la posibilidad elevada de encontrar restos históricos, ya que las obras se desarrollan en la zona más céntrica de Pollença.
Durante estos días, las prospecciones arqueológicas están paralizadas porque la técnica responsable está unos días fuera de la isla. En principio, quedarían otras tres semanas más de sondeos. Mientras, se siguen ejecutando obras en la anexa pescadería para avanzar con el proyecto de reforma que debe transformar el edificio en una sala multifuncional al servicio de los ciudadanos. El presupuesto es de unos 200.000 euros, aunque el proyecto de intervención arqueológica costará un mínimo de 6.000 euros más, según Cifre.
El equipo de gobierno es consciente de que los plazos de la reforma ya no podrán cumplirse y que ya no será posible estrenar las instalaciones durante la próxima primavera, tal y como estaba previsto.
Eso sí, confían en que pueda ejecutarse el proyecto tal y como está redactado. "No creemos que los hallazgos arqueológicos alteren el proyecto", apunta el regidor de Urbanismo, ya que hasta la fecha no han aparecido restos de antiguas estructuras que deban conservarse y que podrían integrarse en la obra mediante la colocación de cristales que permitan visualizar los restos. No es el caso de los restos hallados en Pollença. "Cuando se encuentran cuerpos humanos, el procedimiento habitual es documentarlos, hacer las planimetrías y levantar los cuerpos", explica Cifre.
En este caso, el Ayuntamiento podría completar las obras así como estaba previsto, aunque con un retraso considerable.
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