El ayuntamiento de Manacor, dirigido por El Pi, PP y AIPC-SyS, remarca que la empresa de servicios del municipio, la SAM, “ha iniciado la transición a las energías renovables y la mejora de la eficiencia de los equipamientos, la red y los servicios que ofrece”.

De este modo, se apuesta “por las energías de origen renovable con la instalación de placas solares fotovoltaicas que permiten obtener energías limpias y, al mismo tiempo, reducir la factura eléctrica”. Paralelamente, “también hemos apostado por renovar la flota de la SAM con vehículos eléctricos y multiplicar el número de puntos de recarga para vehículos eléctricos que hay en el municipio”, ha explicado este miércoles la presidenta de la SAM, Maria Antònia Sansó.

Por su parte, Joan Sagrera, vicepresidente, ha señalado que “este compromiso con las energías renovables y de lucha contra el cambio climático es fruto de la adhesión del Ayuntamiento al Pacte de Batles i Batlesses, que es una iniciativa de la Comisión Europea que surgió en 2008, a fin de reducir como mínimo un 20% las emisiones de dióxido de carbono para 2020”. Así, se ha puesto en marcha la transición a las energías renovables “con el objetivo de reducir emisiones de gases de efecto invernadero, aumentar la producción de energía a partir de fuentes renovables y aumentar la eficiencia energética en todo el municipio”, ha añadido.

En este sentido, el propio consistorio apunta que “ya están en marcha las placas solares fotovoltaicas del recinto de los depósitos del Serralt. “Se trata de una inversión de unos 100.000 euros que ha sido subvencionada al 80% por el Govern balear, así la SAM ha aportado 20.000 euros al proyecto y en un año nuestra inversión estará amortizada porque el consumo eléctrico del recinto de los depósitos durante un año costaba precisamente 20.000 euros”, ha destacado Maria Antònia Sansó.

Además, “los tres pozos de la zona sur de la ciudad también contarán con placas fotovoltaicas para autoconsumo, y también se prevé la instalación de placas en la planta depuradora”.

Aparte de la sustitución por vehículos eléctricos de toda la flota del servicio de aguas e incorporar así siete furgonetas, un furgón y un turismo que costarán unos 300.000 euros, “también instalaremos dieciséis nuevos puntos de recarga de vehículos eléctricos”, ha anunciado Joan Sagrera.

Exactamente se invertirán unos 200.000 euros en los nuevos puntos de recarga, que se instalarán en la estación del tren, plaza de Ramon Llull, aparcamientos de Porto Cristo, en los de la plaza de Sant Jaume y na Camel·la.

“Solo con las inversiones realizadas, en los pozos, en la reducción de pérdidas de agua en la red y en el sistema de depósitos, el sistema de captación y distribución de agua ha pasado de consumir 1.500.000 Kwh en el año 2016, a 1.250.000 Kwh el 2018”, ha revelado Sansó. Las previsiones de cara al 2020, reducción hasta 1.000.000 Kwh. Y en 2022, 500.000, ha concluido Sansó.