La ciudad de Inca, que tradicionalmente ha sido una zona de paso para el turismo, abrirá este mismo año el primer hotel urbano en el edificio de cinco plantas donde se ubicaba el histórico horno de Can Guixe, en la calle Estrella número 7, a escasos metros de la céntrica Plaça d'Espanya de la capital del Raiguer. El horno cerró sus puertas a mediados del pasado año 2017 cerró sus puertas a mediados del pasado año 2017y todo apunta a que las instalaciones del antiguo negocio panadero se reconvertirán en la recepción del futuro establecimiento hotelero, que tendrá una categoría de cuatro estrellas.

Se trata de un proyecto promovido por la sociedad Inversiones Greton S. L., con capital alemán y mallorquín, que pretende invertir 395.870 euros en la reforma integral del edificio, que ya ha sido adquirido a los propietarios de Can Guixe por una cantidad que no ha trascendido. El proyecto básico de reforma y cambio de uso de vivienda residencial a alojamiento de turismo de interior ya ha sido registrado en el Ayuntamiento, que lo ha analizado y tiene intención de otorgar la licencia de reforma en los próximos meses. Además, el hecho de que el edificio esté protegido supondrá importantes rebajas fiscales para los promotores, que se ahorrarán hasta un 50% en el impuesto de construcciones.

El edificio donde se ubicará el primer hotel urbano de Inca es anterior al año 1940, según datos del catastro, y está compuesto por planta baja (el antiguo horno de Can Guixe), sótano y cinco pisos. El proyecto presentado en el Ayuntamiento especifica que, según la normativa turística vigente, se permitirán 17 plazas en el nuevo establecimiento.

Según los planos registrados en el Ayuntamiento, la planta baja y el sótano serán destinados a zonas comunes y acceso al alojamiento. Las cinco plantas del edificio albergarán dos habitaciones dobles cada una, con sus respectivos baños en suite. En el último piso se habilitará una habitación sencilla que contará con una terraza exterior. Además, está prevista la instalación de un ascensor accesible en el patio interior para conectar las diferentes plantas.

Los promotores tienen la intención de conservar las "trazas compositivas" de las tipologías del centro histórico, "llegando a una solución respetuosa con las preexistencias, con el predominio de la verticalidad en los huecos exteriores y su alineación respecto a su eje, el diseño diferenciado de lsa plantas bajas como basamento del edificio y un remate de cornisa a modo de logia".

La superficie útil entre todas las plantas del edificio es de 404 metros cuadrados. El acceso principal del establecimiento serán las instalaciones que antes ocupaba el horno de Can Guixe.

La presentación del proyecto hotelero ha sido bien recibida por el ayuntamiento de Inca. El alcalde Virgilio Moreno (PSOE) destaca que la ciudad contará finalmente con su primer hotel urbano, ya que actualmente solo dispone de plazas hoteleras en agroturismos y hoteles rurales.

Dinamización comercial

El alcalde señala que la apertura del hotel, que en principio está prevista para la próxima temporada turística, redundará de forma positiva en el entramado comercial de la ciudad y ayudará a "dinamizar" el sector y también el de la restauración local.

A su entender, otro aspecto destacable es el "efecto llamada" que podría provocar la apertura de un primer hotel en Inca para que otros promotores se animen a invertir en la habilitación de nuevos establecimientos turísticos, permitidos por la normativa urbanística local. Además, Moreno destaca que la transformación del antiguo edificio de Can Guixe en hotel permitirá "recuperar patrimonio" que de otra forma estaría inutilizado, con la consecuente degradación arquitectónica, y que el proyecto "coincide" con la estrategia municipal de "atraer visitantes a la ciudad".