El empresario británico que organizó en 2014 la excursión alcohólica que acabó en el famoso mamading, Paul Smith, asistió este jueves como público a unas jornadas sobre prostitución organizadas por el ayuntamiento de Calvià, en las que se trató el problema del tráfico de mujeres para la explotación sexual.

Paul Smith estuvo acompañado por Nicky Smith, uno de los promotores del grupo de Facebook 'Cleaning Up Magaluf', una página que ha servido como plataforma este verano Magalufpara organizar patrullas vecinales contra la prostitución callejera en este núcleo. Esa acción fue respaldada por empresarios de la zona, especialmente de nacionalidad británica.

En el turno de preguntas para el público después de que se presentase un protocolo autonómico para atender a las mujeres que son víctimas de la explotación sexual, Nicky Smith intervino para señalar que las meretrices que se encuentran cada verano en Magaluf se dedican "a robar y a agredir" a turistas y residentes. Y pidió soluciones a las autoridades presentes en las jornadas, ya que, según dijo, "no se está haciendo nada".

En el momento de su intervención, estaban en el escenario de la Sala Palmanova la directora del Institut Balear de la Dona, Rosa Cursach, y dos técnicos que que habían explicado previamente los detalles del nuevo protocolo autonómico para abordar el fenómeno de la prostitución, Jaume Perelló y Susana Ortega.

El que tomó la palabra fue Perelló, quien dijo hablar desde su experiencia en las calles de Magaluf ofreciendo ayuda a las prostitutas. "Lo que me encontré allí fue a a turistas ingleses ebrios vejando a las prostitutas", señaló Perelló, quien consideró prioritario un cambio de modelo turístico centrado en excesos varios para dejar de atraer la prostitución.

Cambio de política

Perelló alabó el cambio de las políticas municipales de Calvià contra la prostitución, a la hora de luchar especialmente contra quienes se dedican a la trata. En la primera legislatura de gobierno municipal del PP (2003-2007) se empezó a perseguir por la vía penal a las meretrices que ejercen en la calle por un delito de desobediencia a la autoridad por ignorar repetidamente los decretos de alcaldía de suspender su actividad, que se equiparaba a una actividad económica ejercida sin licencia. Esta vía no acabó de fructificar en los juzgados.

La intervención de Perelló concluyó con un largo aplauso por parte de los asistentes a la jornada. Además, la intervención del empresario británico de Magaluf hizo que también pidiese un turno de palabra el teniente Palomo de la Guardia Civil, especializado en este tipo de delitos.

"En 2009, justo después del Convenio de Varsovia de la lucha contra la trata de seres humanos, la Guardia Civil hizo una normativa y entonces inspecciona todos los locales donde se ejerce la prosittución. Este año ha habido una acción policial conjunta centrada en las nigerianas. O sea que, en el ámbito policial, se está trabajando", argumentó.

Antes de todo este debate, la teniente de alcalde de Cohesión Social e Igualdad, Nati Francés, había aludido en su intervención ante el público a las críticas que salen del sector empresarial cada verano por la presencia de meretrices en las calles.

"Les molestan las prostitutas en la calle, pero no el alcohol barato con el que emborrachan a los 'puteros", dijo.

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