El conseller de Patrimonio y el alcalde de Llucmajor Francesc Miralles y Gori Estarellas, visitaron ayer la Torre de Cala Pi, una vez que el Consell ya ha finalizado el proceso de restauración en el que ha estado trabajando la brigada de Patrimonio, con el apoyo del programa SOIB Visibles 2018. Cala Pi se convierte así en la primera torre que ha sido restaurada por la administración insular, dentro del programa plurianual 2017-2020 para la restauración de las torres del sistema costero de defensa, vigilancia y alerta de Mallorca, que continuará con la Torre des Verger-Talaia de ses Ànimes, en Banyalbufar.