El Molí d'en Sopa garantiza que las dos últimas bodas pendientes "se van a celebrar"

Este periódico avanzó en su edición de ayerEste periódico avanzó en su edición de ayer que un considerable número de parejas que contemplaban celebrar sus banquetes de boda el próximo 2019 en el complejo gastronómico, cultural y comercial se temían lo peor al haber concurso de acreedores y reinar la incertidumbre.

Ya el mismo lunes, este diario intentó en vano contactar múltiples veces con Lozano, quien ayer sí que se manifestó y se mostró visiblemente dolido. Reconoció la complicada situación de su negocio pero aseguró que confía plenamente en poder pagar las elevadas deudas que arrastra con proveedores y la familia Duran, propietaria del complejo y que durante 40 años dirigió, de hecho, el restaurante. Según el propio Lozano, en estos momentos la familia Duran ya está en contacto con otras posibles empresas para hacer efectivo un relevo en la gestión.

"De forma amistosa"

Según palabras de Lozano, a las "menos de diez parejas" que habían firmado contratos y avanzado dinero para sus respectivas bodas entre febrero y octubre de 2019 "se les ha devuelto todo el dinero que entregaron, se han rescindido los contratos de forma amistosa, asesorado y ayudado a recolocar, encontrar otros sitios donde poder celebrar sus banquetes". Admite haber tenido "algunos problemas, mal rollo" con una pareja que debía casarse en septiembre, "pero que aún no había avanzado dinero". "En general, todas las parejas entienden nuestra situación e incluso varias se han ofrecido a darnos una mano", añade.

El propio Lozano explica que "desde hace 25 años hago bodas, trabajando aquí en el Molí d'en Sopa, por lo que todo este proceso me consume y estoy apenado". Agradece el trabajo y la comprensión de todos los empleados.