La sede socialista en Manacor ha aparecido hoy 'adornada' con una serie de carteles fascistas con consignas contrarias a la exhumación de Francisco Franco del Valle de los Caídos. En uno se podía leer "PSOE profanador de tumbas", con una imagen retocada del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; en otra "El Valle no se toca", con el dictador cara al sol con los ojos entreabiertos.

La secretaria general de los Socialistas de Manacor, Núria Hinojosa, ha lamentado esta actuación "de unos intolerantes". "No impedirán que sigamos adelante con nuestra labor en defensa de los valores democráticos", ha asegurado.

El ataque a la sede socialista coincide prácticamente con el 43 aniversario de la muerte del dictador ayer, algo que en opinión de Hinojosa demuestra que "todavía queda mucha pedagogía y trabajo por recuperar la memoria histórica, de condena del franquismo, de reparación a las víctimas, de justicia y de verdad".

Ha alentado a las instituciones supramunicipales "a continuar con la valiente tarea emprendida esta legislatura para devolverles a las víctimas del franquismo sus familiares y sobre todo, para sacar al dictador de un lugar de enaltecimiento que no se entiende y que no se encuentra en ninguna otra democracia europea".

En un momento en que están aumentando "los actos y mensajes fascistas, xenófobos y peligroso"s, Hinojosa ha hecho un llamamiento "a la tranquilidad, el respeto entre las distintas fuerzas políticas, al debate de ideas y al regreso a la política como única herramienta para solucionar los problemas que tiene la ciudadanía".

Precisamente, los hechos han ocurrido el mismo día que el Senado ha votado una moción de condena al franquismo presentada por el senador socialista por Baleares Francesc Antich, en la que PP y C 's se han abstenido, algo que, según el PSIB, "demuestra la necesidad de mayor contundencia de los partidos políticos en contra del franquismo".

Es el primer ataque fascista a las sedes socialistas de las islas tras el anuncio del Ejecutivo de Pedro Sánchez de sacar a Franco del Valle de los Caídos pero no en el ámbito estatal, donde numerosas sedes del Partido Socialista ya han sufrido este tipo de acciones