En el último pleno celebrado en Binissalem, el alcalde Víctor Martí explicó que, por motivos de salud, el actual propietario de la licencia de taxi de Binissalem no puede desempeñar sus funciones, por lo que propuso facilitar la transmisión de derechos de dicho servicio, tal y como se hace en las grandes ciudades.

El PP votó a favor de la propuesta y el PSOE se abstuvo, mientras que el grupo Més per Binissalem se posicionó en contra.

El portavoz de la coalición, Pere Pol, explicó que con el objetivo de que hubiera más control público, su grupo era partidario de que dicho derecho retornara al Ayuntamiento y volviera a ser licitada la licencia, una fórmula que considera mejor que realizar una cesión de una persona a otra como si se tratara de una simple propiedad.

Por otra parte, quedó aprobada por unanimidad la propuesta presentada por Més para la futura adhesión del Ayuntamiento a la Agencia de Defensa del Territorio de Mallorca.