"Se hará". Con esta breve frase lapidaria, el presidente de Calvià 2000 y primer teniente de alcalde, Andreu Serra (PSOE), quiere despejar las dudas surgidas sobre la prueba piloto de recogida selectiva puerta a puerta en Calvià vila y en es Capdellà, que en teoría debería haberse comenzado a aplicar este año, pero que se aplazó por la falta de una partida presupuestaria, tal y como ya informó este diario.
Serra apunta que, si finalmente se aprueban los presupuestos de 2019 (los de 2018 no se aprobaron y se prorrogaron los de 2017), el objetivo del Ayuntamiento pasaría por tenerlo todo listo para después del verano del año que viene para impulsar la iniciativa. "La idea es que para que lo pongamos en marcha tengamos que invertir 250.000 euros los tres primeros años y a partir del cuarto se compensaría lo recogido con la inversion hecha", argumenta el presidente de Calvià 2000.
Además de los problemas con el presupuesto, Serra señala otros dos condicionantes para explicar el retraso en la aplicación del nuevo sistema. En este sentido, recuerda que siempre que se plantea este modelo se requiere una bonificacion de la tasa.
Revisión de la ordenanza
"Esto hace que tengamos que revisar la ordenanza a tal efecto, con la complicación que ahora supone esto", declara. Finalmente, indica que para implantar el modelo hay que eliminar todos los contenedores que hay en Calvià vila y en es Capdellà, además de dejar un punto común de zona verde. Como próximo objetivo, se marca septiembre de 2019, con elecciones municipales de por medio.
El inicio de la recogida puerta a puerta, subraya, requeriría la puesta en marcha de una campaña informativa, un nuevo punto verde y la compra de la infraestructura necesaria, entre otros elementos. Ahora hace poco más de un año que el Ayuntamiento calvianer mantuvo reuniones con los vecinos para informarles sobre el nuevo sistema para recoger las diferentes fracciones de desechos: papel, vidrio, envases, orgánico y rebuig (rechazo).
En declaraciones a este diario, el presidente de la Associació d'Amics i Veïns de Calvià vila, Pere Torrens, considera un avance este tipo de iniciativas que fomentan el reciclaje, al tiempo que recordó que otros pueblos de la isla ya aplican este modelo.
Torrens pide que, cuando empiece la recogida domiciliaria de residuos, se haga una potente campaña de información. Y remarca que, en todo caso, debería producirse también una reducción en la correspondiente tasa municipal.
