Ayer se localizó la pieza principal del puzzle que hacía falta para descifrar la documentación de los enterramientos de los represaliados del cementerio de Calvià. La intervención que comenzó recientemente en la fosa común del municipio ha permitido hallar el cuerpo de Joana Vaño Morales, la única mujer entre las 14 víctimas identificadas de la fosa.

Joana Vaño fue capturada junto a su compañero sentimental, Ramon Fuster, a ella la enterraron en Calvià y él fue asesinado el día 11 de octubre de 1936 en Son Pardo, en Palma. Al ser la única mujer represaliada enterrada en Calvià ha sido un descubrimiento clave.

Según informaron desde la conselleria de Cultura, Participación y Deportes del Govern balear, el cuerpo fue hallado sin ataúd y bocabajo y presenta indicios de arma de fuego, lo que coincide con la descripción de una autopsia que se le practicó en su momento. Según la información de la que dispone el Ejecutivo autonómico, la mujer fue asesinada en ses Planas cuando tenía 50 años y enterrada el 2 de octubre de 1936.

A partir de esta localización todo parece indicar que la mayoría de las fosas que se están buscando están debajo de unas tumbas construidas con posterioridad, lo cual complica mucho los trabajos, no obstante continuarán las acciones hasta tener perfectamente claro sobre el terreno la información de los documentos con los que se están guiando. En el cementerio donde hay hasta seis fosas localizadas en dos puntos, las llamadas fosas de tierra, en la parte izquierda de la entrada al cementerio viejo, y en el pasillo central, donde hay pequeñas fosas con capacidad cada una para tres cuerpos.

La de Calvià es una de las exhumaciones históricamente más reivindicadas por parte de las familias de víctimas de la represión franquista y de las asociaciones memorialistas.

Siete días después

La Conselleria informó en la tarde de ayer del hallazgo. Precisamente ayer se cumplían siete días del inicio de la exhumación de la fosa.

Es la primera de las catorce víctimas que restan en el cementerio que se ha encontrado en la actual intervención y el hallazgo se convierte en la primera mujer descubierta en una exhumación en Balears. "De la veintena de víctimas con nombres y apellidos que se tiene constancia que se enterraron aquí, quedarían catorce identificados, después de que seis cuerpos fueron sacados; pero se calcula que podría haber más víctimas", sostienen historiadores.