La amplia explanada de sa Riba, en Lloret, pegada al colegio público, dejará de usarse como aparcamiento debido a que el suelo no tiene aún la calificación adecuada. Se trata de suelo rústico y por tanto el Ayuntamiento desiste de usarlo para ese fin hasta que se aprueben las Normas Subsidiarias.

Sobre el proyecto de planeamiento figura como un futuro aparcamiento, pero al no haber conseguido aún llevarlo a cabo no puede usarse para tal fin. De momento se han efectuado unas obras consistentes en la eliminación de los escombros y restos asfálticos vertidos durante años, nivelación de la finca y construcción de un muro perimetral. Todo ello ha costado 47.000 euros.

Se ha dejado la finca diáfana y sin nada de asfalto. Ahora se plantarán árboles y vegetación para transformarla en un parque público.